¿A quién no le gustaría descubrir la fórmula para mantenerse joven y sano? Por desgracia, aún no hemos encontrado el elixir de la eterna juventud, pero los avances de la ciencia nos han permitido combatir el estrés oxidativo, uno de los principales factores del envejecimiento. Una de las sustancias responsables de retrasar los signos del envejecimiento es la astaxantina, un potente antioxidante natural de la familia de los carotenoides.
Es capaz de proteger el organismo contra la oxidación y el desarrollo de diversas enfermedades como el cáncer, los trastornos cardiovasculares, las cataratas, la degeneración macular, el Alzheimer o el Parkinson. Se encuentra en las microalgas Haematococcus pluvialisAdemás de sus propiedades antiinflamatorias, su consumo puede aliviar el dolor causado por la artritis reumatoide.
Porque oxida el organismo
El oxígeno desempeña un papel importante en el metabolismo celular. Sin embargo, en exceso, tiene un efecto nocivo conocido como oxidación celular, que conduce al envejecimiento. Esto significa que un aumento de radicales libres hace que ciertos átomos se vuelvan inestables y se asocien con otros, lo que puede provocar un aumento de los niveles de oxígeno. dañan las células por oxidación.
Este fenómeno natural varía en su intensidad en función de distintas variables, como la genética del individuo, su estilo de vida y su dieta, entre otras. Progresa lentamente, pero deja secuelas muy notables en el organismo.
La astaxantina en la lucha contra la oxidación celular
A menudo, el número de radicales libres supera con creces nuestra capacidad de producir los antioxidantes necesarios para combatirlos, y el resultado es un sistema inmunitario debilitado debido a las membranas celulares dañadas. Por estas razones, es extremadamente importante mantener un estilo de vida saludable, con ejercicio físico, combinado con una dieta sana, con alimentos ricos en sustancias antioxidantes, como frutas y verduras que favorecen la resistencia de nuestro organismo a la oxidación.
Sin embargo, algunos estudios han concluido que deberíamos consumir 4 mg de astaxantina al día para combatir adecuadamente el proceso de oxidación. Alcanzar esta dosis a través de la dieta es prácticamente imposible, por lo que los expertos recomiendan tomar complementos alimenticios para obtener los beneficios necesarios atribuidos a la astaxantina.
Una vez en el organismo, ayuda a protegerlo contra el estrés oxidativo, combatiendo el exceso de radicales libres y contribuyendo a retrasar el temido proceso de envejecimiento mencionado al principio de este texto.
