Durante el verano pasamos más tiempo al aire libre, tomamos bebidas frías para refrescarnos y pasamos más tiempo en el aire acondicionado. Estos son sólo algunos factores por los que no debemos descuidar nuestro sistema inmunitario durante la estación más calurosa del año, porque no estamos exentos de coger un resfriado, la gripe o cualquier otra dolencia.
No te preocupes, ¡hay muchas formas de mantener tu cuerpo en forma! Aquí tienes algunos consejos para tener un sistema inmunitario fuerte durante los meses más cálidos.
1. Ser aficionado al deporte
Al hacer ejercicio, mejora la circulación sanguínea y se inhibe la liberación de hormonas relacionadas con el estrés, lo que contribuye a la salud del sistema inmunitario. Para las personas mayores, se recomiendan al menos 150 minutos de actividad aeróbica moderada a la semana y dos días de actividades de fortalecimiento muscular. Las personas que llevan un estilo de vida sedentario son mucho más propensas a contraer la gripe y otros virus.
2. Duerma lo suficiente
Cuánto y cómo dormimos contribuye a un sistema inmunitario estable. Sabemos que esto no siempre es posible en verano, pero recomendamos dormir entre siete y ocho horas para que el cuerpo descanse adecuadamente, evitando la aparición de fatiga, cansancio y contribuyendo a una mejor función cerebral, concentración y retención de la memoria.
3. Consumir astaxantina
Este oxidante es capaz de reforzar el sistema inmunitario no sólo en veranosino durante todo el año. Su eficacia es tan importante que también actúa en diversas partes del organismo, como el retraso del envejecimiento cutáneo, la mejora de la resistencia a las radiaciones ultravioletas, el control de la glucemia, la reducción de la fatiga, etc.
4. Mantener una dieta equilibrada
Llevar una dieta desequilibrada o tener sobrepeso son factores que provocan un debilitamiento del sistema inmunitario, además de otros problemas como la diabetes, las enfermedades cardiacas y la pérdida de masa muscular. Es muy importante consumir diariamente los nutrientes esenciales para el buen funcionamiento del organismo: frutas, verduras, carnes magras, entre otros.
5. Disfrute del sol
La vitamina D ayuda al sistema inmunitario a combatir las infecciones. Su carencia puede causar dolores corporales, problemas hormonales, debilidad muscular y mucho más. Además de la luz solar, también podemos ingerir vitamina D consumiendo setas y yema de huevo.
6. 6. Vitamina C
Ingerir vitamina C previene las infecciones e incluso puede reducir su gravedad y duración. Entre los alimentos con mayores niveles de esta vitamina están las naranjas, la acerola, las escaramuzas, las guindillas, la col, la papaya, las fresas, la coliflor, los mangos y muchos otros.
7. Hidratación constante
La hidratación favorece la eliminación de toxinas del organismo. Para conseguir un sistema inmunitario fuerte, haz del agua tu nuevo mejor amigo. A quienes no les guste beber agua todos los días, les recomendamos añadir una rodaja de naranja o limón para darle un toque de sabor. Recuerda que la deshidratación provoca problemas de salud y debilita el sistema inmunitario.